“Ser distinguidos por ‘The Legal 500’ es un reconocimiento a nuestro trabajo y permite al cliente saber que una firma tiene la experiencia que busca”

Jorge Vigil, Socio de Barros Silva Varela & Vigil Abogados.

Barros Silva Varela & Vigil es un estudio de abogados formado en el año 2012 por un grupo de jóvenes abogados dedicados a prestar servicios del más alto nivel que, tras ocho años de actividad, se ha consolidado con un gran equipo de más de 40 personas dentro del mercado de los servicios jurídicos integrales. Hoy, reconocidos en 2018 por «The Legal 500», ranking jurídico internacional con vasta experiencia en la evaluación del mercado legal en todo el mundo, y miembros de Fundación Pro Bono Chile, despliegan sus servicios en diversas materias de especialización tales como asuntos corporativos, fusiones y adquisiciones, tributario, recursos naturales, minería, energía, medio ambiente, financiamiento, derecho laboral, inmobiliario, litigios y arbitrajes.

En la actualidad, y ante el escenario de crisis sanitaria mundial a causa de la pandemia del Covid-19, que ha llevado a la suspensión del funcionamiento presencial de los Tribunales de Justicia en nuestro país, el socio del bufete, el abogado Jorge Vigil, cuenta que “afortunadamente hemos sido capaces de hacer frente a la contingencia y de implementar un procedimiento de teletrabajo que nos ha permitido seguir funcionado”, esto a pesar del magro presente económico que ha golpeado a todos los sectores de la economía nacional.

El jurista, titulado en Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Diplomado en Responsabilidad Civil de la Universidad de Chile, y Master of Laws del London School of Economics and Political Science, aborda además en esta entrevista en profundidad con E-negocios el presente del estudio y cómo han enfrentado  esta crisis mundial, cómo se han visto afectados en sus causas, proyectos y cómo ha impactado en el funcionamiento de tribunales de justicia, como también las expectativas financieras para Chile y el mundo al mediano plazo, entre otros.

-Su estudio fue reconocido por «The Legal 500» en su ranking 2018 para Latinoamérica. ¿Qué significado tiene este reconocimiento y cuáles han sido sus beneficios?

Aparecer en los rankings que destacan a los estudios más valorados de ciertas especialidades es un reconocimiento al trabajo que hemos desarrollado durante estos años. Es un elemento adicional que le permite al cliente saber que una firma tiene la experiencia que busca para resolver sus requerimientos.

-¿Qué significa ser parte de Fundación Pro Bono Chile?

Parte de nuestro rol como abogados es aportar a la comunidad desde nuestro ámbito, y en ese sentido la Fundación Pro Bono es quizás la mejor herramienta para ello, pues es la oportunidad para poner nuestros conocimientos y experiencia al servicio de otros, que de otro modo nunca podrían recibir una asesoría especializada, y que es clave para resolver los problemas que enfrentan.

-Entrando en contingencia, ¿de qué manera se han visto afectados por esta crisis mundial del Covid-19?

Afortunadamente, hemos sido capaces de implementar un procedimiento de teletrabajo que ha funcionado bien: los abogados pueden hacer buena parte de su trabajo desde sus casas. Algunos de nuestros clientes han debido posponer o suspender sus proyectos, pero otros siguen adelante y gracias a ello nosotros también hemos podido seguir trabajando hasta ahora.

-¿Qué tipo de medidas han tomado para hacer frente a la contingencia? ¿Se puede estar preparado para este tipo de crisis?

Nosotros contábamos con el soporte tecnológico necesario para poder teletrabajar, y hemos logrado mantener a todo nuestro personal, no hemos tenido que hacer cambios en ese sentido. Sí hemos tomado todas las medidas de seguridad para los encargos que son presenciales.

Es difícil estar preparados para una crisis así, porque es complejo anticipar cuáles son las dificultades que habrá que sortear. Pienso que la clave es ser flexibles y estar disponibles para acomodarse al escenario que haya que enfrentar, cualquiera sea.

-¿Cómo se ha visto afectado el funcionamiento de los tribunales y procesos de las causas?

Los tribunales han dejado de funcionar presencialmente, adoptando la modalidad de teletrabajo mientras dure la contingencia. Esto ha permitido continuar la tramitación de las causas, adaptando la realización de algunas diligencias a través de Zoom u otras plataformas.

Sin perjuicio de lo anterior, los términos probatorios se encuentran a la fecha suspendidos, lo que se traduce en que no sea posible realizar algunas diligencias propias de dicho periodo, como testimoniales o confesionales, y que algunos tribunales se nieguen a realizar las audiencias de juicios especiales y sumarísimos que contemplan la rendición de prueba en la misma audiencia (por ejemplo, juicios de arrendamiento).

-¿Cuáles son sus expectativas en el ámbito económico financiero para Chile y el mundo al mediano plazo?

La crisis ya la estamos viviendo y es de una magnitud enorme, pero confío en que vamos a ser capaces de superarla con la misma intensidad con la que llegó. El hecho de que sea una crisis mundial y no solo local, va a empujar a todos los países a recuperarse pronto y eso puede ayudar a apurar nuestra propia recuperación.

-En otro tema, ¿qué significa para ustedes ser socios de Camindia?

Ser socios de Camindia nos abre una puerta a un mercado muy interesante y con un potencial de crecimiento enorme. Además, es una oportunidad para conocer e interactuar con empresas de distintos rubros, con necesidades muy diversas y donde podemos aportar nuestra experiencia para su desarrollo.