Pareciera que, hoy por hoy, muchos tenemos la idea preconcebida de que la natación es el deporte más completo, el que hace trabajar mejor al cuerpo, pero ¿es realmente cierto?
Verdad número uno. Cuando nadamos, el sistema cardiovascular y respiratorio se vuelven más eficientes, por lo tanto el corazón es capaz de mejorar la capacidad contráctil. El transporte de sangre y oxígeno se realiza de manera más efectiva, por lo que la gente se cansa menos y siente que puede hacer más cosas que antes.
“Al trabajar en una posición horizontal hay una disminución en la presión arterial. Además, como el peso corporal se reduce en un porcentaje significativo dentro del agua, las personas suelen cansarse mucho menos que si estuvieran ejercitando en tierra”, comenta la profesora de natación Marisol Morán.
Verdad número dos. Con la natación se ejercita todo el cuerpo: brazos, piernas y músculos estabilizadores del tronco. También trabajas fuerza, velocidad, resistencia y flexibilidad. Asimismo, es un deporte que brinda menor impacto en las articulaciones.
Entonces, ¿es el deporte más completo? “La verdad es que sí, y por varias razones. Es una disciplina que tiene más pro que contras. Se reduce en forma significativa el impacto sobre las articulaciones, versus otros deportes como el running. Practicarla tiene una gran influencia sobre el tono muscular, mejora la flexibilidad y los rangos articulares. Cuando se hace una intensidad adecuada, también tiene un impacto sobre el sistema cardiovascular, por tanto mejora la resistencia y con ello el desempeño general de las personas”, explica Morán.
Además, según agrega Morán, al nadar estás trabajando, tanto el tren superior como el inferior, y el core, que son todos los músculos estabilizadores del tronco, espalda, y faja abdominal, teniendo un efecto directo sobre toda esa musculatura estabilizadora del cuerpo, “que a nivel de lo que uno puede necesitar en el día a día, es bastante bueno”.
Conclusión. La natación es un deporte completo no solo porque se utiliza todo el cuerpo, sino también porque tiene impacto a nivel muscular y articular. Además puede ser practicada a cualquier edad, y sus beneficios los podemos comenzar a obtener desde pequeños. Por lo tanto, la idea preconcebida, es verdad.
¿Dónde nadamos? Hoy en día podemos encontrar diferentes piscinas que ofrecen clases de natación. Piscina Acuavida, Georgia 1143, Vitacura. También está la piscina temporada Mi Club ubicada en la calle Valenzuela Puelma 8551, La Reina. Algunos gimnasios también tienen piscina tales como el del Pato Cornejo, Hard Candy, O2 Club, entre otros.
¡Dato! Para aquellos que les gusta la natación, pero se aburren mientras la practican, hoy Sony tiene en el mercado unos Walkman resistentes al agua con los cuales puedes sumergirte hasta los dos metros de profundidad y poseen una capacidad de 4 GB para unas mil y dos mil canciones. Puedes adquirirlos en http://store.sony.cl desde $69.900.
¿Estás listo para comenzar a nadar?
Sin embargo, ¿es apropiado que una persona que sepa o no nadar se aventure a practicarlo sola? Según la especialista esto no es posible, ya que un entrenamiento en el agua siempre debe estar guiado por un coach, ya que hay riesgo de sufrir una lesión por un movimiento mal ejecutado, lo que puede provocar dolores lumbares o cervicales por una posición mal realizada en el agua. “Además al haber un entrenador a cargo del trabajo, el deportista se asegura de obtener la modulación y el volumen de carga adecuado a sus capacidades, de esta forma no se sobre exige. Con una buena supervisión se adquiere una técnica correcta y se va ganando poco a poco resistencia”, explica Morán.