Según Ipsos, el 22% de los chilenos sigue una dieta vegetariana, y ocasionalmente consume proteína animal. Al mismo tiempo, estudios aseguran que disminuir el consumo de carnes rojas, moderar el de otras fuentes de proteína animal y aumentar el de alimentos de origen vegetal como legumbres, frutos secos, frutas y verduras, es la medida más eficaz de reducir el impacto ambiental y mejorar la salud.
Los hábitos alimenticios cambian, la preocupación por el planeta aumenta, y algunas empresas ya han comenzado a innovar para integrarse a estas nuevas tendencias que buscan un futuro sustentable.
Los flexitarianos no son vegetarianos ni veganos, llevan un régimen a base de vegetales combinado con la ingesta esporádica de alimentos de origen animal. Es una tendencia alimentaria que rápidamente gana terreno y que, según los expertos, es la forma ‘verde’ de comer carne y ayudar al planeta.
Ser flexitariano resulta ser una Dieta Sostenible, según la FAO, ya que cumple con ciertos factores que lo confirman como el hecho de tener bajo impacto ambiental y contribuir a la seguridad alimentaria y nutricional, y a una vida saludable para las generaciones actuales y futuras.
¿Eres un flextariano y no lo sabes?
Según un estudio de Ipsos, un 22% de los chilenos sigue una dieta vegetariana, pero ocasionalmente come carne, como lo hace un flexitariano. Un porcentaje que aumenta y ante el cual la industria alimentaria no queda indiferente, como es el caso de Hellmann’s que, en su constante búsqueda por innovar e integrarse a las diferentes tendencias alimentarias, es la primera marca de consumo masivo del país en lanzar una mayonesa vegana con 0% ingredientes de origen animal. Pensando en una alimentación más amigable y saludable para el planeta y las personas, Hellmann’s viene a ayudar al consumidor con esta alimentación que está basada en plantas. Además, campañas como el “Lunes Sin Carne”, #VeggieChallenge, ayudan a popularizar esta tendencia alrededor del mundo.
Al 2050 no habrá alimentos suficientes para todas las personas de la Tierra
Una cifra que confirma la revista Nature y por la cual los expertos proponen como soluciones para mitigar los impactos ambientales futuros: reducir el desperdicio de alimentos (alrededor del 30% de la producción mundial de los alimentos no se consume), mejorar tecnologías en la producción de alimentos y realizar cambios en la dieta hacia patrones de consumo que incluyan mayor cantidad de alimentos de origen vegetal reduciendo, sobre todo, el consumo de carnes rojas. Siendo este último el que tiene un mayor potencial para reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
Otro estudio concluyó que varias dietas basadas en plantas mejoraban los parámetros de salud de la población con menor mortalidad debido a la reducción de prevalencia de varias enfermedades crónicas como las cardiovasculares, cáncer y diabetes.
Ambos estudios coinciden en que una dieta flexitariana es beneficiosa para las personas y el planeta. Asegurando que, si todo el mundo adoptase una dieta basada en plantas, para el año 2050 los efectos combinados sobre la producción (reducción de la carne y gases de efecto invernadero de la agricultura) disminuirían en más del 50%, clave para reducir el calentamiento global.