No quería pasar desapercibido y su primer desfile post retiro de la firma francesa en la Semana de la Moda de Nueva York de seguro quedará grabado en la mente de sus seguidores y críticos.
La semana de la moda de Nueva York comenzó hace unos días y Alexander Wang no quiso desaprovechar esta oportunidad para llamar la atención de la prensa y realizar un desfile en la iglesia de San Bartolomé en Park Avenue presentando su colección otoño-invierno 2016/2017.
Pero utilizar este lugar específico para mostrar sus prendas sólo buscaba generar irreverencia, ya que sus diseños poco tenían de angelicales. Por el contrario, en el desfile se pudo percibir un estilo más grunge y una estética punk apostando por el cuero, tachuelas y colores como el blanco y negro.
El diseñador claramente quiso demostrar que recuperó aquel espíritu rebelde que lo llevó a lo más alto hace algunos años. En las tenidas más casuales se apreciaron jersey sueltos, botas con doble suela, faldas con estampado de hojas de marihuana y prendas con mensajes. Incluso Wang al final del show salió a saludar con una camisa que decía “Holy Smoke” (humo sagrado).
En lugar de diseños más estructurados y conservadores como los que se le podían ver en colecciones anteriores, el diseñador utilizó patrones mucho más sencillos pensados para un público más juvenil.
De seguro serán muchos los que querrán adquirir algunas de sus prendas y sin duda sus diseños marcarán tendencia en la próxima temporada.