Por Francisca Guevara
Así como las mujeres nos preocupamos de tener buenos productos para tratar nuestra piel o maquillarla, es necesario dar el cuidado necesario a nuestros cosméticos para que estén en óptimas condiciones al momento de usarlos.
Muchas veces mis amigas me han comentado que tienen un lápiz de ojos o una máscara de pestañas hace años y no se han fijado en su vencimiento y menos se preocupan de su limpieza; y para que les voy a mentir, antes de convertirme en maquilladora la verdad tampoco me preocupaba mucho del estado de lo que me aplicaba y menos le daba el cuidado necesario. Pero eso fue cambiando con el tiempo, al fin y al cabo entendí que son nuestros mejores aliados y como tales es indispensable darles la importancia necesaria, manteniéndolos en buen estado para evitar dañar la piel, o en casos extremos, contraer alguna enfermedad.
Para empezar es muy importante saber que los cosméticos tienen una vida útil y fechas de caducidad que hay que tener en cuenta, porque de no hacerlo podrían estar perjudicando nuestro rostro, ya que las bacterias también pueden afectar los productos que las mujeres utilizamos.
Para darles una idea, las bases duran aproximadamente un año, los rímel seis meses, rubor dos años, y todo dependerá también del ambiente en el que se mantengan guardados.
Una muy buena opción es organizar el maquillaje en cajas, bandejas o en un espacio fresco donde no exista humedad y si es posible, separarlos en categorías o secciones. Olvídense de tener sus cosméticos en el baño ya que les pueden aparecer hongos y afectar su composición.
Las bacterias en los productos permanecen en la capa superficial, por lo que con un papel liso se debe retirar esta capa antes de utilizarlos. Evita realizar este paso con papel higiénico ya que podría dejar residuos.
En el caso de los polvos compactos por lo general se le suele formar una capa pastosa, como grasa. Lo ideal es rasparla hasta que desaparezca, de no ser así podría generar hongos. Otra opción es agregar algunas gotas de alcohol para desinfectar, pero esto no siempre es bueno, ya que puede afectar la composición del producto.
En el caso de que se les rompa una sombra y no la quieran botar, lo mejor es molerla, aplicarle tónico o agua, presionar para comprimir y dejarla secar.
Mantengan los lápices ya sea para labios u ojos tapados y sáquenles punta con frecuencia, así evitarán que se les adhieran microbios.
Las brochas y esponjas nunca deben estar húmedas o con residuos de maquillaje, debido a que originan propagación de bacterias. Estas deben tener su propio estuche.
En el caso de labiales y lápices, para desinfectarlos es necesario sumergirlos en un vaso con alcohol. El labial se debe hundir hasta la mitad y en el caso de los lápices sólo la punta. Luego lo sacamos y esperamos a que el alcohol se evapore, así estarán desinfectados sobre todo si los hemos compartido con alguien.
Y así podría seguir todo el día enumerando consejos para que cuiden sus productos, más que mal son los que nos ayudan a vernos mejor y sacarnos partido. Lo importante es que con estos simples consejos podrán mantener en buen estado sus cosméticos y a la vez estarán cuidando su rostro.